Miro al mapa de la Liga Adelante, la Segunda División de toda la vida, y la verdad, me dan calambres en las piernas. Será una liga más o menos competida, con más o menos nivel, con más o menos candidatos para el ascenso; todo eso lo veremos. Pero lo que está claro es que va a ser una liga larga, larguísima en cuanto a kilómetros… para la UD Almería.
Al tiempo que miro el mapa, a toda velocidad mi mente ejecuta la acción de doblarlo por la mitad , de Norte a Sur; y me doy cuenta de que el Almería tan sólo va a tener tres rivales en la mitad Sur del campeonato: Córdoba, Elche y Albacete. Y menos mal que los impagos le han cambiado Éibar por Elche.
De lo demás, de los 18 restantes desplazamientos, los más cercanos son Alcorcón y Leganés; es decir, todos de 600 kilómetros para arriba. Dos islas, como Mallorca y Tenerife; y luego Oviedo, Lugo, Ponferrada, Miranda, Valladolid, Soria, Bilbao, Vitoria, Pamplona, Zaragoza, Huesca, Girona, Tarragona y Llagostera.
Más les vale a los de Sergi ir comprándose un baúl como el de la Piquer y a la afición olvidándose de los desplazamientos ésos de ida y vuelta, tipo Granada o Málaga, porque de ésos va a haber muy pocos. Fíjate lo que es el fútbol, que los resultados nos han cambiado lo que parecía una plaza cercana fija como Cádiz por un cómodo viaje a Bilbao.
Y es que este año, aunque en Primera División va a haber hasta cuatro equipos andaluces, por tan sólo dos en Segunda, parece evidente que el epicentro del fútbol se ha desplazado hacia el Norte.
Equipos con cierta tradición o al menos presencia en la Liga de Fútbol Profesional, como el Jaén, el Recreativo, el Hércules o el Murcia ahora purgan sus pecados en la categoría de bronce y eso se deja notar en las distancias kilométricas.
El Sur ha perdido peso en el mapa balompédico patrio, nos guste o no; y quienes lo pagan son fundamentalmente las aficiones, que en esta época de planificar viajes y pensarse muy mucho si liarse la manta a la cabeza para seguir a sus equipos allá por donde vayan, tiran de Guía Repsol y se les terminan poniendo los pelos estilo Thievy.
Si la Liga o la Federación dieran puntos por los kilómetros recorridos, el Almería sería, sin duda, el candidato número uno al ascenso. Pero como por ahora ésta no es una de las rocambolescas decisiones que suelen tomar estas instituciones, a los Alfonso Boys no les queda más remedio que olvidarse de lo esquinado y recóndito de nuestra geografía y tirar para adelante, pero muy para adelante. Bastante más allá de Alicante.
