En mi anterior articulo –“no todo se hace mal en la UDA”-, dejaba mi opinión sobre el buen trabajo que se está haciendo en el Almería con el Almería B. Los resultados son palpables, las cesiones de chavales para el primer equipo hablan por sí solas y, lo que es mejor, la afición, disfrutamos cada domingo en el anexo de buenos ratos de fútbol. Reitero mi felicitación. Pero mucho me temo, que no es oro todo lo que reluce, lo que ganamos en el verde, lo estamos o vamos a perder en los despachos.
Son muchos los jugadores que han pasado por el filial, pero muy pocos los que consi-guen debutar con el primer equipo, y mucho menos quedarse. Siempre me he pregun-tado el por qué o por qué jugadores como Dani Romera no está en Almería, jugadores que atesoran calidad suficiente para reforzar equipos de nuestra liga como el Cádiz. Pero no sólo el almeriense, el pichichi de la pasada temporada, el sevillano Jesús Sille-ro, es uno de los estandartes del filial del Córdoba ahora mismo o Gianfranco, que es-tuvo casi toda una temporada en la grada por cuestiones contractuales de su contrato.
Ahora le toca al de Pujaire, Juan Antonio Segura García. Si la memoria no me falla, al mediocentro almeriense no lo vemos en un once desde el 20 de agosto del pasado año, entrena con el equipo, pero no entra en el once, de locos. Se habla que el At. de Madrid lo quiere, y al final, estoy seguro, se irá como se fue Gianfranco, sin jugar y sin dejar nada en las arcas, pero mientras tanto, Fran no podrá contar con su calidad y nosotros de su juego.
Además de él, este mismo domingo pudimos ver marcar a Chema Núñez su décimo gol esta temporada, gol que ni tan siquiera celebró, incluso, fue cambiado por Darío Guti en la segunda parte y ya era palpable su malestar. El centrocampista es, sin lugar a dudas, el pulmón y el cordón umbilical del equipo, desbordante por su juego, uno de los más destacados de la categoría podíamos decir, pero otro que, por motivos obvios, dejará pronto de pertenecer a la Unión Deportiva Almería.
Alfonso García siempre ha dicho que nunca truncaría la trayectoria de un jugador, pero lo que no entiendo, es que ni tan siquiera Fran pueda contar con ellos para realizar sus onces, y sacar de ellos el máximo partido mientras estén aquí. Para mí, es muy de per-fil bajo actuar así con jugadores que lo dan todo, demuestran que, aunque es respetable su futuro, aquí quieren lo mejor para el Almería. Lo mismo el secreto está en apostar por ellos, ofrecerles mejoras y, no tener que gastar fuera si lo tenemos dentro.
Quiero seguir pensando en positivo, que la situación de los chavales se va arreglar, que el próximo año contaremos con ellos nuevamente para nuestro gozo en Segunda B –porque este filial tiene mimbres de conseguir el ascenso-, y que los que por edad o con-trato no puedan seguir, lo hagan en el primer equipo, quiero pensarlo, de lo contrario, volveré a escribir mi opinión, pero bajo el título “No todo se hacía bien en la UDA”, espero no hacerlo.
Sr. García Gabarrón, cuide lo que funciona, porque lo que funciona no hay que tocarlo, sólo mimarlo y dotarlo de medios.
IMPORTANTE…Si tiramos de historia, la palabra SOS comenzó a utilizarse el 1 de julio de 1908, después de haber sido adoptada por el gobierno alemán tres años antes. En realidad, SOS no quiere decir nada en particular, no es la sigla de ninguna frase, el SOS que llevamos conociendo hace más de un siglo fue seleccionada por su simplici-dad. Cuando digo SOS filial, no lo pongo por su simplicidad, todo lo contrario, sé que no es tan simple, pero pienso que no todo vale, y menos con los que defienden mi ca-miseta…
