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La UD Almería ha dormido hoy, tras varias semanas fuera e incluso lejos, en zona de descenso. Como ya han predicho en varias ocasiones diversos profes de Radio Marca Almería, la segunda vuelta tiene la propiedad de resucitar muertos.
Y ya tenemos aquí los primeros. Esta semana, el Barcelona B ya ha empezado a ganar y la Cultural Leonesa ha tomado impulso y se ha alejado algo de la zona roja.
En esta tesitura, habrá que recordarle al presidente que aún quedan tres días para que se cierre el plazo de fichajes, que el equipo sigue teniendo una necesidad imperiosa de firmar uno o dos centrales y uno o dos hombres de banda, siempre y cuando demos por bueno que Soleri es el hombre gol que también nos hace falta, cosa que lo visto ayer no termina de aclarar.
Es curioso ver cómo el Almería, además de un punta, se ha reforzado por ahora con un mediocentro, que es el puesto mejor cubierto que tiene la plantilla hasta el momento, pero que al parecer nadie termina de ver la necesidad de fortalecer el centro de la zaga.
Dentro de tres días, el Almería ya no podrá reforzarse, ya no habrá oportunidad de que Trujillo, Morcillo y Owona, estos dos últimos lesionados, tengan compañía en la zona de atrás; que Lucas pueda llevar a Joaquín a la zona de mediocampo que es donde quería hacer jugar al huercalense; y que Javi Álamo cuente con competencia en la banda derecha sin necesidad de hacer jugar a nadie a pierna cambiada.
Ayer, en partido a las seis de la tarde, el Mediterráneo apenas pasó de 5.000 espectadores. Hacía frío, sí, como es normal en enero; pero la mitad de los abonados decidió quedarse en casa.
No estaría mal, para los que fueron y para los que se quedaron viéndolo por la tele, hacer un esfuerzo final por trabajarse el mercado, lo cual serviría para aumentar un poco la escasa ilusión reinante y ayudar a Lucas a conseguir un objetivo que, con los mimbres que se le han dado al granadino, parece más bien diseñado por un enemigo.
