La Federación Andaluza de Baloncesto celebró su asamblea en la que se analizó el contexto de la próxima temporada y la posibilidad de celebrar los torneos pendientes en las mismas sedes previstas.
De manera telemática, han tenido lugar las asambleas ordinaria y extraordinaria de la Federación Andaluza de Baloncesto. Tras constituirse la asamblea, se aprobaron por unanimidad las actas de las asambleas ordinaria y extraordinaria anteriores. A continuación, el presidente Antonio de Torres, expuso su tradicional informe, que en esta ocasión trató en su mayor parte sobre la situación excepcional en que nos encontramos, extendiéndose en la explicación de los protocolos de FAB y su creación, así como diversos temas del máximo interés y actualidad, informando de la orden que publicó ayer la Junta de Andalucía, por la que los cuerpos técnicos salen de los listados fijos de 25, y explicando distintos detalles sobre la misma.
También indicó que los CASEBA y CADEBA que no se han celebrado se vuelvan a ofrecer a los organizadores inicialmente previstos, para su celebración cuando fuera posible. Otro tema importante que puso sobre la mesa es la facilitación de los test rápidos a los jugadores, entrenadores, asistentes, delegados y árbitros andaluces. El presidente finalizó su intervención apelando a la responsabilidad de todos en la situación excepcional en que nos encontramos y agradeciendo públicamente a los empleados de la FAB el esfuerzo y sacrifico que vienen realizando desde el comienzo de esta situación.
Posteriormente, se aprobaron, por unanimidad, la Memoria Deportiva 2019/2020 y el Calendario Deportivo 2020/2021, así como las cuentas y liquidación del periodo 2019 y el presupuesto 2020. Siguiendo con el orden del día, se aprobó, también por unanimidad, el Código de Buen Gobierno, se comunicaron los diversos cargos estatutarios y disciplinarios, y la remuneración del presidente, aprobada en anterior asamblea, así como otros temas.
