VÍDEO BLOG #Minuto92: La titularidad de Sadiq, por Víctor J. Hernández Bru.
Sabido es que Sadiq Umar no es santo de mi devoción. No lo fue en su arranque en el Almería, cuando se mostró como un delantero torpe, desgarbado, fallón en las ocasiones mas claras y exasperante por momentos en el juego; no lo fue más tarde tampoco, cuando hube de rendirme a su rentabilidad goleadora en los meses centrales de la temporada; y desde luego no lo fue en la recta final del campeonato, en la que ha redondeado una cifra muy respetable de goles, pero con destellos de divismo, fallos imperdonables, falta de integración en el plantel y casos de rebeldía que tengo claro que no ayudan a un equipo.
La efectividad, este año, de Sadiq, es algo incuestionable, como también lo es su irregularidad, su individualismo, su falta de integración en el colectivo y esos episodios de rebeldía que incluso se han llegado a poder palpar sobre el terreno de juego, decidiendo por sí mismo en lanzamiento de un penalti y de una falta, arte para la que desde luego no está para nada dotado, y llegando a enfrentarse con un compañero con amenazas a la finalización de un partido.
Sadiq ha salido ahora a la palestra para afirmar que está dispuesto a seguir en la UD Almería, después de que quienes no cejan en el empeño de montar a su alrededor campañas dignas de un top mundial, con supuestas ofertas de los clubes más importantes que jamás llegan a concretarse en nada.
Según mis informaciones, la UDA está loca por deshacerse del nigeriano, no sólo porque entiende que es su activo mejor colocado para poder obtener un pellizco importante del mercado sino también porque entiende que su mejor temporada en el equipo ya ha pasado y su carácter díscolo ya sólo puede tener nefastas consecuencias; un carácter que, por cierto, tampoco convence al entrenador.
Pero seguramente Sadiq se quedará en el equipo, por la sencilla razón de que el caché que el club le ha colocado no está en precio de mercado, no hay equipos ahí fuera que estén dispuestos a hacer esa apuesta económica por él ni siquiera una cercana.
Y ojo a la nueva salida de pata de banco del delantero, que ha dicho que se quiere quedar, pero que si se marcha, será a algún equipo que le asegure la titularidad. Si empezaba estas líneas reconociendo que el punta no es santo de mi devoción, remarco, para terminar, que ningún profesional del deporte que se crea en el derecho de que le aseguren que será titular, contaría en absoluto para formar parte de mi equipo… por mucha calidad que atesorase… que no es el caso.
