A veces (no siempre) los entrenadores nos recuerdan que si ellos están en la dirección técnica de un equipo profesional de cualquier deporte es porque tienen las capacidades necesarias para ello. Recientemente Luis Enrique, entrenador de la selección nacional generó un revuelo en parte de la prensa por decir que “si estoy de entrenador de la selección es porque se mucho más que vosotros (refiriéndose a la prensa)”
Todo esto viene por lo ocurrido el pasado domingo con la alineación de la UDA. Tras una victoria mucho más trabajada de lo que podría insinuar el marcador (3-1 frente a la Real Sociedad B), con apenas 63h de descanso (incluyendo desplazamiento a Miranda, provincia de Burgos) se plantaba la UDA el domingo a las 14:00h en un campo que en años anteriores se nos había atragantado en varias ocasiones.
Campo de dimensiones reducidas, donde el público está muy encima aunque la capacidad del estadio no sea muy alta, combinación de jugadores experimentados y jóvenes talentos que obliga a la entidad a que cada verano recomponga su plantilla y un clima mucho más frío (habitualmente aunque el domingo no fue así), hacían de esta salida un escollo reseñable en la lucha por el liderato de la UDA.
Para colmo algunos jugadores de la plantilla acabaron “tocados” el jueves y entre los que ya causaban baja por lesión, los que el jueves tuvieron molestias y el partido tan seguido…, el técnico estaba obligado a realizar cambios en su 11 titular que ya se ha visto alterado seriamente por las bajas de Robertone y Ramazzani.
Y entonces….., sorpresa!!!! Al menos un cambio en todas las líneas de juego (excepto la portería) y uno muy significativo por el momento en el que se producía, que era la suplencia de Sadiq (jugador-franquicia, recuerden el artículo de la semana pasada) que venía de marcar un gol y dar dos asistencias en la victoria del equipo, es decir, de participar activamente en los tres goles que hizo la UDA.
Por primera vez en la temporada Dyego Sousa sale de inicio en el equipo como cambio más sintomático, pero, como he comentado antes, había cambios en todas las líneas de juego. Martos, Arnau, Portillo, Centelles…, todos los “profes” que íbamos a comentar el encuentro nos quedamos sorprendidos por la decisión del míster de poner en el campo tanto cambio a la vez respecto del equipo que había sido la base en las jornadas precedentes.
Yo mismo afirmé que me costaba crecer que este once hubiera coincidido en algún entrenamiento porque entre lesiones, llegada al equipo de algunos jugadores y el poco tiempo para entrenar con el que se encuentran ahora los equipos me hacía dudar de que hubieran jugado alguna “pachanga” juntos esos once jugadores.
Todos los que nos disponíamos a comentar el partido mostrábamos nuestra sorpresa por la atípica alineación que ponía en juego la UDA (incluso en el grupo de whatsapp de los “profes” se hacían este tipo de comentarios).
Con la “cera” que se le dio a Rubi por el resultado de Amorebieta (recuerdo que perdimos y el míster hizo 3-4 cambios respecto al once de la jornada anterior) nos preparábamos para una situación muy similar.
Nada más lejos de la realidad, la primera parte de la UDA fue, con mucha diferencia, los mejores minutos de juego de la temporada, intensos, rápidos, movilidad en todos los frentes, resultado, 0-3 en los primeros 30 minutos y la sensación por parte del Mirandes de no saber cómo parar esa tormenta de juego.
Muy buena puesta en escena de Dyego Sousa (jugador que llegó en los últimos días de mercado, con falta de entreno y ritmo de competición pues llevaba 8 meses sin poder jugar a causa de una lesión) y con el que el propio Mister en una de las primeras ruedas de prensa de la temporada no se mostraba nada contento. Hat-trick y pase de gol (interviene decisivamente en los 4 goles que marca la UDA) ahí es nada. Juego muy vertical, desbordando por banda continuamente y saliendo de la presión del rival con mucha facilidad.
Como seguro que llegaran momentos donde volveremos a cuestionar la alineación o la disposición táctica del equipo, mi reconocimiento a esa labor de dirección técnica a un hombre que, sin demasiados aspavientos, está consiguiendo forjar un grupo con mucha hambre de triunfos. Los hechos son irrefutables, las opiniones como el c***, cada uno tenemos la nuestra.
¿Vosotros que pensáis? Espero vuestros comentarios.
