El técnico, que elogia al rival, afirma que “queremos dar continuidad en el partido a la muy buena semana de trabajo que llevamos”.
“A nosotros sólo nos vale ganar el lunes a la Ponferradina”; así de claro y de contundente se expresaba Rubi, entrenador del Almería, en la rueda de prensa previa al encuentro que los rojiblancos van a afrontar correspondiente a la trigésimo quinta jornada del campeonato. Es el primero de los ocho que restan para la conclusión de la fase regular de la Liga y también el primero de los cuatro que disputarán los rojiblancos en casa. El técnico tiene muy claro que “queremos ir a por todos los partidos, comenzado por el inminente del lunes”.
Y es que como argumentaba “queremos volver a la senda del triunfo en nuestro estadio porque no hemos podido ganar los dos últimos, aunque tuvimos mejores sensaciones que resultados, como también la jornada pasada en Huesca donde el equipo terminó jugando con nueve. Rubi está convencido de la reacción rojiblanca y subrayaba que “el lunes queremos dar continuidad a la muy buena semana de trabajo que llevamos”. Si eso es así el entrenador del Almería no dudaba en afirmar que “la Ponferradina tendrá problemas para frenar nuestro ataque”.
Al hablar del adversario, el técnico del conjunto almeriense destacaba que “mucho se está hablando que ha salido de los puestos de play-off, pero es por el gol-average por lo que sigue ahí metido. La verdad es que yo sólo puedo deshacerme en elogios por la temporada que está haciendo. Es un gran equipo con un gran entrenador y cuerpo técnico, que se han ganado el respeto de todos en la categoría. Su plantilla no es de las más caras, pero está muy bien confeccionada. Nosotros tendremos que hacerlo muy bien para poderle ganar”.
Rubi añadía que “tiene muchas virtudes” y subrayaba al respecto que “es muy peligroso en los centros laterales, a balón parado, al contraataque…”
El técnico también tenía palabras para la afición: “No les puedo pedir más de lo que ya hacen y le estamos muy agradecidos”, pero la Liga está en su fase final y decisiva, y manifestaba que “les pediría que empujara a nuestros jugadores y que apretara al rival para que sufra, siempre deportivamente hablando”.
