VÍDEO BLOG #Minuto92: El escandaloso ‘caso Pacheco’ y la salida de pata de banco de Rubi, por Víctor J. Hernández Bru.
Me gusta Rubi, no lo voy a negar. Me parece que está haciendo un trabajo excepcional en la UD Almería, con los recursos que el club ha puesto en sus manos y con la organización general de un club en el que sobra el dinero y faltan profesionales de gestión con valía.
Pero eso no quiere decir que no se equivoque. El domingo, en sala de prensa tras el partido, el técnico tuvo varios errores de bulto, imperdonables, con el atenuante de que se trata de errores en materia de comunicación, que el club debería contribuir a evitar rodeando al técnico, que es profesional del fútbol, de expertos en comunicación que le asesoren.
Del tema de comunicación del club ya hemos hablado muchas veces, con un departamento dirigido por alguien que ni sabe ni tiene ninguna ilusión ya por aprender y, sobre todo, por trabajar en beneficio del club en una materia tan apasionante y en la que un club profesional puede hacer tantas cosas como ésta de la comunicación.
Ya hemos dicho muchas veces que es inaudito que los medios, que no somos otra cosa que un intermediario crítico entre el club y la sociedad, o sea, en este caso la afición, no tengamos nunca información sobre cuestiones que han sido básicas toda la vida como estado físico de jugadores, expediciones, planificación, etc, al margen de prácticamente hayan desaparecido los puntos de contacto entre la prensa y los jugadores, donde se puede preguntar y no limitarse a reproducir lo que pregunta un empleado del club, donde en definitiva se puede hacer periodismo, salvo los que son obligatorios por la Liga.
Pero ya digo que es un tema ya muy trillado. Vayamos al grano: el domingo, tras el partido, mi compañero José Luis Pascual primero y mi compañero de la SER, Rafa Góngora, después, preguntaron acerca de la situación de Fernando Pacheco. La respuesta de Rubi fue increíble, inaudita, quejándose de que se le preguntaba por el tema todos los días.
Lo primero que denota la respuesta es que Rubi, experto y veterano en los banquillos, está muy verde en materia de comunicación, que no me canso de repetir que debería ser asignatura obligatoria en los cursos de entrenador, por la sencilla razón de que muchos técnicos se juegan tanto ante la prensa que en la dirección de sus equipos. Pero sobre todo denota que nadie en el club, ni por supuesto el jefe de prensa, advirtió al técnico cómo abordar este tema.
Querido Joan Francesc: la situación de Pacheco no sólo es escandalosa, sino que no está resuelta; y mientras no lo esté, la obligación de un periodista es preguntar todos los días por su evolución. El que no entienda esto, no tiene ni la más repajolera idea de la obligación de un periodista. Porque Pacheco es un señor que afirma en privado que vino aquí porque le prometieron la titularidad y que no está dispuesto ni a seguir ni a trabajar con normalidad si no lo es; un jugador de la plantilla que ya no va ni convocado y cuyo caso está creando un pésimo ambiente en el vestuario.
Lo extraño no es que un periodista pregunte cada día sobre el caso; lo inconcebible es que dos meses después de que estallara esta situación, nadie en el club le haya buscado una solución. Queridísimo ‘míster’, mi consejo es que te dediques a hacer tu trabajo y busques aliados que no lo entorpezcan dentro del club, dejando a los periodistas hacer el nuestro. Lo contrario, te lo digo con todo el cariño y con la experiencia de un cuarto de siglo gestionando comunicación de organizadores, no te va a ayudar nada; pero nada de nada.
