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Represión sin animación

Represión sin animación.

La UDA encaja un ‘set’ en Montilivi, haciendo el mayor ridículo que se le recuerda, víctima del excesivo ‘ruido’ que rodea al club desde hace ya mucho tiempo.

FICHA TÉCNICA.

GERONA CF (6). Gazzaniga; Arnau Martínez, Santi Bueno, Juanpe, Javi Hernandez (Artero, m. 82); Tsygankov (Toni Villa, m. 65), Aleix García, Oriol Romeu, Rodrigo Riquelme; Borja García (Iván Martín, m. 76) y Taty Castellanos (Stuani, m. 76).
UD ALMERÍA (2). Fernando; Akieme, Mendes (Ramazani, m. 45), Ely, Babic; Samu Costa (Chumi, m. 45), De la Hoz, Robertone; Embarba (El Bilal, m. 45), Baptistao (Arnau, m. 45) y Luis Suárez.
ÁRBITRO. Pizarro Gómez (VAR: Jaime Latre). Amonestó a los locales Borja García y a los visitantes.
GOLES. 1-0: Taty Castellano (m. 7). 2-0: Tsygankov (m. 32). 3-0: Riquelme (m. 36). 4-0: Javi Hernández (m. 42). 4-1: Ramazani (m. 66). 5-1: Iván Martín (m. 77). 6-1: Stuani (m. 79). 6-2: El Bilal (m. 80).
INCIDENCIAS. Partido correspondiente a la vigesimosegunda jornada de liga en la Primera División, disputado en el estadio de Montilivi de Gerona.

CRÓNICA.

La UD Almería ha tocado fondo. El equipo de Rubi ha descrito un absoluto ridículo en la cancha de un rival directo como el Gerona, con una primera parte de absoluto bochorno y una segunda mitad en la que ha seguido encajando goles de patio de colegio, con un sistema defensivo intolerable y una actitud algo más que sospechosa de los futbolistas.

Un Almería cuyo fútbol no atisba mejoría ni reacción, que ha terminado reventando, contaminado por el excesivo, por el inasumible, por el insoportable ruido que siempre lo rodea todo en este club, desde peleas con jugadores, señalamientos a otros, problemas con la afición y con periodistas y, en general, un pésimo clima para que los profesionales, muchos de ellos sin nivel para la categoría, puedan centrarse en lograr el casi quimérico objetivo que se les ha marcado.

Un caos, un desastre, una vergüenza de primera parte (4-0).

La primera parte ha sido una chirigota, una charanga de carnaval, con un Almería vergonzoso, un equipo que no ha merecido bajo ningún concepto el calificativo de profesional, que ni siquiera ha sido arrasado por un Gerona que ha parecido el Brasil del 70, sino que se ha dedicado a auto-agredirse por todos y cada uno de los rincones del terreno de juego.

El arranque del partido ha sido una ‘película’ que ya se ha visto en varias ocasiones esta temporada, con un Almería que amagaba con llegar al área rival, con un par de centros que podrían haber ocasionado peligro, para que todo terminara en el primer tanto del Gerona en el minuto 7, con un centro desde la derecha y remate de uno de los dos jugadores que estaban solos en el segundo palo, Taty Castellanos, cuyo remate ajustado al palo derecho suponía el 1-0.

El Almería volvía a ver un partido desde atrás, volvía a tener que remar para remontar el río y, lo que es peor, exhibía una alarmante debilidad defensiva y una falta de rigor defensivo en la medular, que le volvía a colocar en situación de tener que remontar.

En el 25, el Gerona volvía a marcar, de nuevo en una acción lamentable de la zaga de la UDA, que terminaba en remate solo de nuevo de Castellanos, pero en acción anulada por un fuera de juego anterior. El Gerona tocaba a placer en todos los espacios del campo y el Almería estaba absolutamente perdido en el 105×70.

Pasada la media hora de juego, la UDA confirmaba los malos augurios y se derrumbaba sobre el césped de Montilivi, encajando dos goles en tres minutos, primero con Tsygankov y más tarde por medio de Riquelme, en una verdadera vergüenza de actitud defensiva del equipo en general (3-0).

Una segunda parte sobrante.

El segundo tiempo sencillamente ha sobrado. La UDA ha comenzado con cuatro cambios, pero pensar no ya en remontada sino incluso en competir era ya una quimera, tras el rotundo ridículo de la primera parte. Durante otros 45 minutos, un equipo sin alma y sin orgullo deambulaba desangrándose sobre el terreno de juego, mientras el Gerona sesteaba plácidamente ya con los tres puntos en lo más profundo de su bolsillo.

A pesar de ello, en el 66 marcaba el Almería, en una acción absolutamente aislada de un hombre que no entiende de pájaras y va siempre a tope, Robertone, que llegaba a línea de fondo para el remate de Ramazani al fondo de la portería (4-1).

En los últimos quince minutos, el espejismo de la UDA se ha desvanecido con otras dos acciones calcadas a las de los goles de la primera parte, para que marcaran dos recién ingresados, primero Martín y más tarde Stuani, para alcanzar la sonrojante cifra de seis (6-1). Y acto seguido, en el 80, una pelota adelantada sobre la carrera de El Bilal, provocaba que éste driblara a central y portero, para colocar el 6-2.

De ahí al final, una amplia colección de ‘minutos de la basura’, aunque en realidad el partido lo ha sido por completo en el caso de la UD Almería, que hoy ha marcado un horrible punto de inflexión y ha sacado la bandera blanca, ha encendido la luz de alarma. Habrá que ver si en el club hay alguien que sepa qué hay que hacer en este caso.

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