No entiendo a los entrenadores de hoy en día. Igual que dije que no me gustaban los penaltis modernos, tampoco me gustan los entrenadores que quieren ser padres. Está claro que muchas veces, por proteger a los jugadores, lo que hace es que haya más grupos, que se dividan los grupos que los jugadores entre ellos, que cada vez haya más tirantez.
Creo que un entrenador lo que debe hacer en una rueda de prensa y en los vestuarios, sobre todo, si algún jugador ese partido está mal, hay que decirlo. Estoy cansado de tanto como protegen a los jugadores que están mal en el partido. Por un lado lo entiendo, porque si lo haces públicamente parece que está cargando contra el jugador, pero ya lo hace señalándolo cuando lo cambia.
Cuando ves que la actitud no es correcta, la corriges, entonces creo que deberíán ser más sinceros en las ruedas de prensa, pero no solo Rubi, todos los entrenadores. No entiendo porque protege cada vez que hacen un partido desastroso como el otro día contra el Girona, con un seis a dos y que la culpa es de él, la culpa es tuya un 30%, de los jugadores, un 20 y un 50 de que no te proteja siempre a los jugadores, porque a veces hay que darle caña y también hay que darle caña al club.
¿Qué pasa? Pues que a veces se teme por el puesto de trabajo, tememos perderlo y pasa lo que pasa. Vamos a dejar de proteger a los jugadores y cuando hay que darle caña hay que darle caña y espabilará a más de uno, seguro.
