El entrenador neerlandés Rinus Michels en la década de 1970-80 fue el primero que sembró la semilla del ‘fútbol total’ en los Países Bajos y Johan Cruyff cuando fue entrenador explotó el llamado ‘tiki taka’ convirtiéndolo en la filosofía y seña de identidad desde entonces del FC Barcelona, a su vez Guardiola quiso dar un paso más al introducirle nuevas variantes ayudado por las nuevas tecnologías y métodos de preparación física, también la selección española lo adaptó y mejoró contribuyendo a que España ganara dos eurocopas y el mundial de Sudáfrica en 2010.
El ‘tiki taka’ es un estilo de juego que se caracteriza por el dinamismo de sus jugadores con el uso de pases cortos y precisos en las transiciones, con movimiento de balón constante y el mantenimiento de la posesión con la búsqueda incesante de espacios, estrategia que permite a los jugadores ajustar sus posiciones y carreras de manera que se aprovechen al máximo los huecos que les conceda el rival.
Pero dicho estilo de juego ya solo tiene nostálgicos admiradores de la teoría, y si no que se lo pregunten al Barcelona que en su reciente visita a Almería de poco o nada le sirvieron los 561 pases que dieron lo que significó un 73% de la posesión de balón, pues la realidad es que solo lanzaron una sola vez a portería, y la efectividad en jugadas aisladas que le han servido para llevarse la victoria en otros partidos esta vez no se produjeron. Por su parte la UD Almería planteó un partido serio considerándome el primer sorprendido después de ver lo Montilivi, y puntualizo, gratamente sorprendido que le permitió dejar su portería a cero y con una actuación muy destacada de sus centrales jugando sin complejos ante el líder y haciendo historia al ganar por primera vez después de 18 enfrentamientos al Barcelona. El equipo de Rubi ya es el tercer mejor equipo como local, tan solo lo superan Barcelona y Real Madrid.
En la actualidad, la práctica nos dice que lo que realmente es efectivo es el fútbol vertical y directo, con transiciones rápidas, la presión alta, el despliegue físico, la intensidad en todas las zonas del campo y el sacrificio para robar y golpear con contragolpes a un ritmo frenético. Estas son las mayores virtudes de esta nueva identidad del fútbol actual, pero el fútbol como todo en esta vida se encuentra en un cambio constante y esta nueva fórmula de juego puede que haya llegado para quedarse o solo sea una filosofía también temporal. El debate está abierto… y habrá opiniones para todos los gustos y seguro que también nuevas opciones a considerar en un futuro.
