El argentino supera las molestias que tuvo en el Reale Arena y el serbio hace parte del trabajo con una protección que le cubre el escafoides.
La Unión Deportiva Almería disfruta hoy de una jornada de descanso tras jugar el pasado domingo en el Reale Arena y verse obligado a hacer noche en San Sebastián, ya que el equipo rojiblanco abandonó el estadio pasada la medianoche. Cuerpo técnico y futbolistas regresaron al hotel para coger por la mañana un autobús que les llevó a Vitoria y volar hasta la capital almeriense.
Minutos después de desembarcar en el aeropuerto de El Alquián los hombres de Pepe Mel se pusieron manos a la obra con la primera sesión de la semana que, como suele ser habitual, fue de recuperación para los jugadores que más minutos tuvieron ante la Real Sociedad y más intensa para suplentes y no convocados, aunque con el balón como principal protagonista.
La buena noticia de la sesión fue la presencia con total normalidad de un Luka Romero que notó molestias el domingo y que fue sustituido en el descanso por Largie Ramazani. El jugador argentino tuvo su actuación más gris desde que llegó procedente del AC Milán en el mercado de invierno, muy impreciso con el balón, viendo una tarjeta amarilla y con problemas para echar una mano en labores defensivas por un flanco en el que Javi Galán hizo mucho daño.
Por su parte, Marezi solo hizo parte del trabajo con el grupo y, además, protegido por una férula después de romperse la pasada semana el escafoides, algo de lo que no ofreció información el club y que se conoció en la rueda de prensa previa de Mel. El serbio, que disfrutó de la titularidad en el último partido en casa, sigue viviendo un via crucis esta campaña tras haber padecido también lesiones musculares.
