El central serbio ya trabaja con el grupo y podría contar con minutos en la recta final de la temporada y antes de tomar una decisión sobre su futuro.
La Unión Deportiva Almería ya trabaja de cara al encuentro del próximo jueves ante el Fútbol Club Barcelona en el que tiene la complicada misión de ganar su primer partido como local, algo que apremia para no acabar la temporada como el único equipo en la historia de La Liga en no hacerlo. Aunque habrá una oportunidad más, ante el Cádiz CF, los rojiblancos intentarán repetir el triunfo del pasado año frente a un conjunto azulgrana que ha encarrilado la segunda plaza.
El cuadro indálico ha planificado la semana atendiendo a una intensa agenda que le llevará a jugar un nuevo encuentro el domingo en Mallorca. Tras hacer noche en Sevilla el domingo, la plantilla voló ayer de regreso hasta la capital almeriense y de inmediato se dirigió al Anexo del Juegos del Mediterráneo para realizar una primera sesión que fue de recuperación para los jugadores titulares y más intensa para el resto.
Las miradas estuvieron puestas, fundamentalmente, en Aleksandar Radovanovic, el central serbio que sigue pendiente del alta médica, aunque ya se le puede ver aparentemente recuperado y trabajando junto a sus compañeros. El hecho de que ya llegase lesionado en el mercado de invierno y el riesgo de las dolencias musculares parecen invitar a la UDA a ser prudente con su regreso.
Por lo demás, César Montes volverá a la convocatoria una vez cumplida su sanción e incluso apunta al once tras el pobre rendimiento ofrecido por Édgar González y Chumi ante el Real Betis y que pueda dar con uno de ellos, e incluso los dos, en el banquillo. Aún tendrá que esperar Ramazani que llega al ecuador de su sanción tras su altercado con Ortiz Arias.
