La plantilla se marcha de vacaciones tras una pésima temporada y dispondrá de algo más de un mes de descanso antes de comenzar con los reconocimientos médicos.
La temporada 2023-2024 ha llegado a su fin para la primera plantilla de la UD Almería, que la ha cerrado con un suspenso; con el descenso a Segunda División, certificado ya hace varias semanas, pero, según el club, con el firme propósito de intentar volver a la máxima categoría del fútbol español. Por ello se trabaja en la entidad, aunque todavía no hayan trascendido noticias, «entre otras cosas porque hay competiciones que siguen en liza, porque los profesionales tienen contrato en vigor hasta el 30 de junio».
Después de la campaña recién finalizada toca hacer borrón y cuenta nueva, lo que «no significa una revolución». Casi todos los futbolistas están con su continuidad firmada en su día, aunque obviamente habrá movimientos, máxime tras el descenso.
“Ahora toca limpiar la cabeza y volver con las pilas cargadas”, destaca Alex Centelles, que pide que todos, afición incluida, “hagan un punto final a una temporada” que cataloga de “atípica y trágica”, por cómo se ha desarrollado. Pero mientras unos descansarán, otros están inmersos, desde el descenso contra el Getafe, en la planificación que tiene que ser la idónea para cumplir con una frase que pronuncia el vestuario: “El objetivo y la obligación es ascender”. En cualquier caso, será muy complicado, pero para nada imposible porque el Almería ya tiene experiencia en este tema. De todas formas, esto no excluye el reconocer que “la Segunda División da miedo”, como así lo subraya Alex Centelles a tenor de cómo está la competición en la categoría de plata.
La temporada 2024-2025 se iniciará, salvo cambios de última hora, el 16 de agosto… incluso hasta podría ser el jueves 15, que es festivo, y acabará el 1 de junio en cuanto a la fase regular de LaLiga en Segunda, se refiere, porque luego también están los play-off.
El Almería comenzará los reconocimientos médicos y los entrenamientos durante los primeros días del mes de julio, y la idea es arrancar con una base importante. Radovanovic, que no duda en declarar que “tenemos que asumir la responsabilidad y el compromiso de intentar subir”, también tiene muy claro que “la pretemporada es fundamental”, algo que falló el año pasado.
