Desde la llegada del ministro saudí a la propiedad, ningún técnico firmado en verano ha aterrizado en Almería antes del 28 de junio.
Fruto del aprendizaje, de las circunstancias o de ser el equipo que más pronto ha terminado su temporada en el fútbol profesional español, la Unión Deportiva Almería estaría a punto de firmar una de sus planificaciones más precoces. La puntualidad a la hora de cerrar el banquillo y la plantilla no ha sido la mejor de las virtudes de la dirección deportiva encabezada por Mohamed El Assy y João Gonçalves. Más bien todo lo contrario, teniendo en cuenta que, por ejemplo, la primera incorporación del curso anterior llegó el 6 de julio: Édgar González.
Esta dinámica se ha repetido también en el puesto de entrenador y es por eso que llama la atención la inminencia con la que se augura la llegada de Rubi. La dupla de los despachos rojiblancos ha puesto a los mandos del primer equipo a un total de nueve técnicos, de los cuales tan solo tres llegaron antes de empezar el curso liguero: Pedro Emanuel, Mário Silva y Vicente Moreno. Sin embargo, ninguno de ellos aterrizó en la provincia de Almería en la primera quincena de junio.
En primer lugar, Pedro Emanuel llegó de la mano de Turki y estampó su firma el 4 de agosto de 2019 para acordar su marcha del club 92 días después y ser reemplazado esa misma madrugada por Guti. Tras la marcha del de Torrejón de Ardoz, hospedó el banquillo el que hasta ahora ha sido su entrenador más puntual, Mário Silva. El portugués, según Transfermarkt, fue anunciado el 28 de junio como entrenador de la Unión Deportiva Almería. Por último, el verano pasado, el sábado 1 de julio a las 23:00 horas, se comunicó en redes sociales la llegada de Vicente Moreno.
Es decir, que Rubi, o quien sea, apunta a ser el entrenador que más tiempo tiene para empezar un proyecto con la Unión Deportiva Almería. Un hecho que tampoco es especialmente positivo, teniendo en cuenta que la UDA ha tenido tiempo de sobra para rematar un trabajo que Sevilla o Osasuna ya han hecho.
