El técnico almeriense apuesta por la continuidad y el desarrollo de jóvenes talentos en el equipo absoluto húngaro
El técnico almeriense Sergio Mullor echará raíces como seleccionador de Hungría. Cuando se cumple su primer año en el cargo, alcanzó un acuerdo para prolongar el contrato hasta 2028 con el gran objetivo de seguir dando continuidad a un proyecto a medio y largo plazo en el que se quiere dar cabida en el combinado absoluto a jóvenes valores que llegan con mucha fuerza desde las categorías inferiores.
Mullor destacó tras rubricar su nuevo contrato que «estoy muy contento, esperanzado con lo que viene. Hungría es un país que desde el principio me acogió con muchísimo cariño, lo pasé muy bien como entrenador de club en los cuatro años que estuve y me encontré con la sorpresa de que me llamaran para ser seleccionador nacional. Ahora llega una nueva sorpresa porque me ofrecen ampliar el contrato cuando todavía me quedaba un año más».
El entrenador almeriense destacó que aunque no suele ser habitual en el deporte actual este tipo de proyectos, desde la federación húngara han entendido que «hay una base y una creencia de que los procesos son muy importantes en el mundo del deporte y están apostando por esta opción de un proyecto para crecer, sentando bases desde abajo a arriba».
La filosofía pasa por «incorporar a jugadores jóvenes», por lo que «es necesaria esa confianza por parte de la junta directiva de la Federación, y parece que están muy convencidos».
Sobre las claves para que esta unión esté resultando muy satosfactoria para ambas partes, Mullor recordó que «yo ya tenia experiencia fuera de España tras haber estado en Qatar, conocía esa aventura de vivir un fútbol sala diferente, la primera vez que salí pensé que cuanto antes volviese mejor, pero ahora estoy convencido de que en el extranjero se vive igual de bien».
Se siente valorado el entrenador almeriense que recordó que «los dos proyectos que he tenido en Hungría han sido porque me han llamado, han querido contar conmigo y que yo esté allí. Me pasó cuando llegó al club, que al final estuve hasta cuatro años, mientras que la selección se interesó cononciéndome a conciencia y sabiendo el trabajo que podía desarrollar allí».
Esa continuidad no se ha dado en España y el almeriense lo valora porque «allí no se contrata solo por el nombre, lo hacen porque creen en lo que haces», algo importante teniendo en cuenta que el reto es duro y va a necesitar de mucha fe. Hungría no ha jugado ninguna de las cuatro últimas eurocopas, aunque Mullor señaló que «es un país que está creciendo en cuanto a la Liga y los clubes, está aumentando el nivel de profesionalismo que hay en los equipos y hay que intentar acercarse a otros deportes como el balonmano o la natación en la que es una potencia». El seleccionador está especialmente motivado porque «con el nuevo contrato ya podré instalarme junto a la familia».
