La UDA no contempla la continuidad del centrocampista y espera la colaboración del jugador y su agencia para una salida que amortice su traspaso.
La Unión Deportiva Almería quiere resolver lo antes posible el futuro de Dion Lopy que ha sorprendido en su país asegurando que quiere quedarse en el club rojiblanco y en el fútbol español tras la experiencia vivida este año. El jugador senegalés, cuyo rendimiento en la recta final de la temporada ha sido nulo, no solo no abre la puerta a una salida, parece dispuesto a echar un pulso, al menos ante los medios.
Lopy ha disputado esta temporada 2023-2024 un total de 32 partidos entre Liga y Copa del Rey. Ha visto cinco amarillas y ha jugado un total de 2.105 minutos. Unos números muy parecidos a los del año pasado, cuando jugaba en la Ligue1 y disputó (entre Liga y Copa) 31 partidos, dio dos asistencias y vio también cinco tarjetas amarillas. Jugó menos minutos: un total de 1.520.
Pese a que las cifras son muy similares, la sensación generalizada es de que mientras en Francia el jugador aumentaba su valor, atrayendo el interés de varios equipos europeos además de la UDA, en este momento ha bajado sensiblemente su cotización, a lo que ha ayudado su progresiva desaparición de la selección con la que no estuvo en Copa de África y con quien no ha disputado un solo minuto en los dos últimos partidos de clasificación para el mundial.
Las declaraciones de Lopy, no obstante, no alteran el pulso de la UDA y es que en los despachos del Juegos del Mediterráneo están convencidos de la complicidad del internacional y de su agencia de representación para gestar su salida en unas condiciones favorables para todas las partes. Los casi siete millones de euros que se pagaron por él dificultan rentabilizar la operación.
