VÍDEO BLOG #Minuto92: Ya empezamos engañando con Melamed y las estrellas: no se aprendió nada del pasado año con Arribas, por Víctor J. Hernández Bru.
Mal empezamos. Y luego dicen los ‘bufandas’ con patas que critico a la UDA, confundiendo como hacen siempre la crítica a una gestión con la crítica a un club. No se les puede pedir mucho más.
Recordaréis los asiduos, tanto los que os acordáis habitualmente de mis muertos más frescos como los que me consideráis un valiente de la sinceridad, que el año pasado advertí que no se podía dar catalogación de estrella en Primera División a un futbolista como Arribas o a otro como Pubill, llegados de Segunda B y Segunda A respectivamente, o a futbolistas que venían de la zona media de la liga francesa, como Koné o Lopy.
Además, añadí que, respetando al máximo a estos jugadores y pareciéndome alguno de ellos buenos ‘peloteros’, si nuestros fichajes estrella eran jugadores que habían de afrontar tan brutales saltos de categoría, el panorama que se cernía sobre la UD Almería era trágico. No me equivoqué. Si acaso, me quedé corto, a la vista de los hechos que desde entonces han acaecido y que todos conocemos.
Este año, las cosas no parecen ir por derroteros demasiado diferentes. De hecho, no contentos con dejar pasar el mes de mayo en el que el club ya sabía que su primer equipo militará la próxima campaña en Segunda, es decir, que se había consumado el descenso matemático, también se ha dejado pasar junio sin certificar ni una operación de jugadores, ni entradas ni salidas, y tan sólo con el fichaje del técnico; es decir, exactamente lo mismo que el pasado año.
Desde que hemos pasado hoja del calendario, metiéndonos en julio, las noticias han sido la vuelta a sus equipos de los cedidos, Choco Lozano y Luka Romero, es decir que en ninguno de ambos casos hay noticia puesto que esto ya se sabía, así como la renovación de Luis Maximiano pagando 8.1 millones de euros y la confirmación del fichaje del que todo el mundo hablaba: Nico Melamed.
No puedo decir que yo sea un gran conocedor de Melamed y, por supuesto, tengo en cuenta que el nivel en el que va a competir el futbolista será Segunda División. Desde luego que si el fichaje fuera para Primera, sería obvio que no se puede considerar un refuerzo de lujo.
Pero ni siquiera tratándose de un equipo que va a militar en la categoría de plata, puedo sustraerme a que, de nuevo, hemos empezado con el mismo mal pie y con las mismas trolas melenudas que el pasado año, habiendo tenido que leer ya calificativos como “fichaje top” e incluso aquello de “estrella”, tras haberse confirmado la contratación de Nico.
Hombre, Nico es un futbolista que, efectivamente, este año ha militado en Segunda y además en un equipo que ha ascendido, aunque no haya sido de manera directa. Sin embargo, la observación de sus datos, un año más, vuelven a dejar en evidencia a quienes con tan poco se lanzan por el desfiladero del elogio exagerado hasta el ridículo: Nico ha jugado este año con el Español un total de 26 partidos de competición oficial, de los 46 en los que podría haber actuado, tan sólo 19 de ellos como titular. Repito… ¡Ha sido titular en 19 partidos de 46 de competición oficial!, con un balance de cuatro goles, 17 tiros entre los tres palos, cuatro pases cortados, 59 recuperaciones, cuatro asistencias y 243 pérdidas de balón.
Sincera y humildemente, sin perjuicio del rendimiento que pueda tener el próximo año y subrayando que me parece un buen futbolista, creo que si alguien es capaz de ver en estas cifras a una estrella, tiene un gravísimo problema con la realidad.
