Como todos sabemos a estas alturas, Vicente Moreno ha sido destituido de su cargo, un entrenador que ha tenido un alto porcentaje de culpa de que el equipo no funcione, pero vamos a poner que un 50% lo ha tenido la directiva o el Comando Fontaneiro que son los dos que se ocupan de los fichajes a pesar de que hay mucha gente profesional trabajando y dando informes a diario, pero ellos al final hacen lo que quieren y así está la plantilla que tenemos.
Vicente Moreno ha hecho lo que ha podido y el problema que tenemos ahora es que ahora nos encontramos al equipo con dos puntos, el último, con una situación paupérrima de juego, con aficionados que no están animados y la sensación que están dejando algunos jugadores, y el problema es que nadie quiere venir a ese banquillo. Se ha tocado a cinco o seis entrenadores y ninguno quiere venir, normal sabiendo que la plantilla hay que sacarle el máximo provecho y las condiciones con las que se trabaja, con los que hay arriba y el caso que le hacen a los entrenadores y la presión que sufren cuando no juegan los que tienen que jugar.
Ya lo vimos en el caso de Rubi, creo que es la primera vez que alguien salva a un equipo y en la rueda de prensa justo a los dos minutos dice que se va, aquí sabemos todo como funciona esto y me da pena por los aficionados que vivimos esto. El banquillo desierto, a ver qué entrenador se ofrece, pero tiene muy mala pinta el Almería.